Yo no soy nada fuera de lo normal, ni siquiera algo normal. Solo algo que ya no camina si no es con alguien de verdad, algo que necesita a todo lo que le rodea para poder verse vivo, y todo lo que le rodea es lo que cualquier ser humano desearía que le rodease.
Me siento fuera de lugar, en un sitio en el que no me corresponde lejos de lo que si me correspondía y me corresponderá. Estoy atrapado en una espiral de tonterias y bobadas que pueden hacer más daño que la bala de un cañon y que crean heridas incurables que el tiempo, por mi, va a curar. Porque no hay que ser medico para saber que las heridas del corazon son dificiles de curar, precisan de una buena persona al lado y de unas buenas lecciones de amor, del arreglo de las cuerdas de una guitarra que dejo de sonar y del cable de unos altavoces que no emitieron más sonido que el silencio de la desconexión. Porque para mi estar como estoy es no tener el ansia de ver como las nubes se pueden traspasar, como los rayos de sol pueden calentar o ver como el agua ya no me llama para que la beba, pues ese agua solo quiere no verme más aqui.
Algún dia, ojalá no lejano, leeré esto entre risas, esperando ver como todo lo que me rodeaba y pensaba que podia dejar de hacerlo no ha cambiado y estoy a tu lado, en un sofa menos comodo de lo que esperaría, pero junto a ti, nada mas importante que junto a ti...
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